Shut the window

Video-arte







A veces miro por la ventana con la absurda intención de encontrar respuestas en el mundo que se abre bajo el alfeizar.

Me gusta observar los edificios, ver sus colores, modificarlos a mi antojo con la mirada. Y distorsionarlo... Distorsionarlo todo.

Observar el ciclo continuo de los coches al pasar, indiferentes, irreconocibles, inubicables en el tiempo.

Me gusta sentir que puedo volar, que puedo tocar el mundo... que puedo retroceder al pasado.

Me gusta sentir que tengo capacidad para controlar el barullo que hay bajo mis pies.

Me gusta sentir la imagen palpitando, latiendo, llena de vida; y aparentemente tan vacía.

Respiro, y el compás de mi ritmo es seguido por todo aquello que ahora contemplo. Y todo. Todo... se vuelve en blanco y negro.

Los matices han cesado, y los tejados se han caído.

El tiempo se paraliza subjetivamente y estás solo; solo con el mundo. Solo con el horizonte. Preguntándote porqué oyes tú los gritos, porqué ves tú el dolor y el sufrimiento. Y nadie lo siente, ni lo nota.

A veces miro por la ventana, a veces...
...Y no veo nada, ni a nadie.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy lindo, no habia leido algo asi...
Segui asi, yo sigo leyendo...
Saludos.